Mamushka
Ahora me mirará, tendrá el mismo rostro que pone al estar nerviosa. Resistiré un par de segundos sin quebrar la mirada y me levantaré en forma tranquila a preguntarle su nombre.
Se llamará Antonia, se irá conmigo a tomar un café y conversaremos de algo ligero. Me dirá que tengo esposa y que no la puedo amar, que mis hijos están en la casa y que no debo hablar con extraños.
5 comentarios:
pasé por acá.
Mucho arte en casa.
un gusto.
saludos
.
será niñita y cuando le pregunten por su nombre, dirá Antonia
yo le escribiré cuentos, desde antes de nacida
y conocerá los recobecos de cada jardín y cada música
(pero es un sueño a parte y mío... sólo los nombres se cruzan)
te quiero extrañamente extraño!
patad
Hola. Te ví de link en el blogspot de Pamela. Me imaginaba que como 'viajero' escribirías de viajes y cosas así. Pero me equivoqué. Saludos de todas formas.
Suspiremos y rompamos con toda condición.
Ahhhy... Qué dichosa, que inmenso minuto de la luminosidad.
Vamos a comer helado.
Patad
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